Como hace más de 400 años, cada 31 de diciembre los riojanos acudimos con fe y alegría a nuestra plaza principal para ser testigos de un nuevo Tinkunaco: el encuentro de nuestro Niño Jesús Alcalde y el Patrono San Nicolás.
Que bendigan con salud, trabajo y felicidad a La Rioja.
¡¡Viva el Niño Alcalde, Viva San Nicolás!!